Qué pasa si un adolescente no tiene amigos

Escrito por Fina Kuggen

Socióloga y divulgadora

Tener amigos y pasar tiempo con ellos es fundamental durante la adolescencia. A veces, sin embargo, los jóvenes no son conscientes de esta realidad y se ven inmersos en relaciones tóxicas que les consumen mucho tiempo o les animan a hacer cosas que no quieren hacer. Para prevenir esto y enseñar a tu hijo adolescente a crear amistades sanas, profundas y duraderas, es importante que aprenda a disfrutar el tiempo que pasa con sus amigos. Aquí hay algunas claves que puedes pasarle.

En la vida, hay días muy largos que no se notan y momentos que no se van practicando y quedan grabados para siempre en nuestra memoria. Esto se debe a que el valor de cada momento no está determinado por su duración sino por el valor que le damos y cómo lo usamos. Entonces, en lugar de «perder el tiempo» con amigos, es importante concentrarse en crear hermosos recuerdos que puedan atesorarse y agregar valor a la relación.

Ayudar a adolescentes sin amigos

Cuando los padres notan que algo no va bien, por ejemplo su hijo adolescente no quiere salir con amigos, es importante señalar si es voluntario o voluntario. por una situación que no puedes manejar. En este caso, los padres pueden ayudar al adolescente sin amigos comenzando a averiguar cuál es la causa del problema. A esta edad, probablemente el joven no esté muy abierto a compartir sus sentimientos, es importante aprender a conectar con él, evitando cualquier comportamiento o comentario que le lleve a rechazar nuestra ayuda y cerrarse en sí mismo. La actitud de los padres debe ser lo más neutral y flexible posible.

La base de la juventud sin amigos muchas veces viene de la niñez. Por alguna razón que parece irrelevante para un adulto, el niño tuvo una experiencia desagradable. Algunos niños son realmente crueles y otros son muy sensibles. A partir de ese momento el niño optó por separarse del resto de los niños para evitar el dolor. En este caso, es bastante común haber desarrollado una imagen negativa de ti mismo, quizás hayas interiorizado que no tienes valor o que te avergüenzas de una característica física y no tienes las herramientas para gestionarla.

Cómo ayudar a un adolescente a hacer amigos

Por diversas razones, como padres o madres, pueden encontrarse con un problema que afecta a muchos adolescentes, y es la dificultad para hacer amigos. Para un padre o madre puede ser muy difícil ver a su hijo o hija adolescente en circunstancias difíciles en este sentido, con pocos amigos o poca vida social, lo que puede hacerle pensar seriamente en cómo ayudar a un adolescente a hacer amigos.

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Las razones por las que un adolescente puede llevar sin nada o con pocos amigos pueden ser muy diversas, por ejemplo el adolescente es tímido e introvertido, piensa diferente a los demás o no otros adolescentes a su alrededor tienen el mismo interés. . Además, empezar en una nueva institución puede ser un cambio que le dificulte adaptarse en ese sentido.

¿Por qué mi hija o mi hijo no tiene amigos?

Debemos tratar de responder esta pregunta primero. Para ello, es importante establecer una conversación con nuestros hijos donde podamos conocer las dificultades y consecuencias que sufren al relacionarse con los demás.

Aunque es difícil abordar este tema, por la privacidad que exigen o por nuestro miedo a su reacción, es importante que les preguntemos qué nos pueden decir de forma flexible y abierta. Será fundamental anteponer nuestras primeras respuestas a lo que nos dicen en pro de una actitud comprensiva.

Encontrar la manera correcta de comunicarse con su adolescente

Como probablemente sepa, comunicarse con los adolescentes es uno de los temas más complejos en la profesión de la educación. Un día puede haber volatilidad y al día siguiente no habrá silencio. La comunicación es difícil de mejorar, pero un paso en falso puede empeorarla. Antes de adentrarse en el terreno de la intimidad adolescente, aunque sea de puntillas, conviene pensar y elegir con mucho cuidado el momento y la forma.

Si vas a entrar en la habitación de tu hija para hablar con ella, deja lo que esperas en la puerta. Claro, hay muchas cosas que quieres decir, pero la conversación será más productiva si pasas mucho más tiempo escuchando. También querrás darle buenos consejos, pero quizás tengas que ponerte en su lugar. No es que lo juzguéis según vuestros principios, pensamientos y experiencia, sino que tratéis sinceramente de entender cómo se siente, lo extraño que es para vosotros. Sólo entonces puede haber una conexión.