Paradójicamente, en un mundo cada vez más conectado, a muchas personas les resulta más difícil hacer amigos. La amistad es el vínculo estrecho entre dos personas o un grupo. Esto suele basarse en sentimientos como el afecto, el respeto, la lealtad o la compasión. Es una de las relaciones más importantes que pueden existir, y por tanto es un elemento fundamental para desarrollar una vida plena y plena.
En consecuencia, cuando una persona tiene dificultad para hacer amigos, su bienestar emocional se ve muy afectado. En estos casos suelen presentarse problemas como depresión, baja autoestima, miedo, etc. Por esta razón, es necesario buscar formas de fortalecer las relaciones de amistad.
Los eventos de networking son una buena forma de conocer gente
Mucha gente piensa que los eventos de networking solo sirven si se trata de ganar dinero. De hecho, muchas personas conocen a sus amigos de toda la vida en eventos de networking.
Las personas que hacen amigos en los eventos de networking a menudo tienen cosas en común, como antecedentes, intereses u ocupaciones. Los eventos de networking son lugares donde puedes conocer personas que son como tú, pero que de otra manera no estarían en tu vida.
Ansiedad social.
En resumen lo podemos definir como un miedo fuerte que tenemos en situaciones sociales que requieren interacción con otras personas. ¿Qué determina nuestra acción? Uno de los obstáculos más persistentes a los que se enfrentan las personas para hacer nuevos amigos es el miedo a no saber relacionarse, el miedo al rechazo. Hay muchas situaciones en las que las amistades pueden pasar a un segundo plano frente a otras prioridades, como el trabajo, el cuidado de los niños o el envejecimiento de los padres; en el que casi todo el tiempo libre se dedica a la pareja o la familia, y un paulatino alejamiento del grupo de amigos.
Cuando hay una separación, la muerte de las personas a las que cuidamos, los niños se independizan, etc. esa persona se encuentra sin un grupo de referencia, que muchas veces está relacionado con sus aficiones cuando lo eran -de carácter social- han sido sustituidas por la relación de pareja-familia con la que también dejó de practicar. Las habilidades interpersonales, como cualquier habilidad, cuando dejan de practicar, pierden naturalidad y espontaneidad, en definitiva, se “olvidan” si las tenían, y si no las tenían o si había dificultades, las aumentan.
El que tiene un amigo es atesorado
Una de las autoras del estudio, Julianne Holt Lunstad, señaló que las relaciones interpersonales pueden afectar nuestra salud y, por tanto, los años que vivimos. . Puede ser «normal» para nosotros los humanos confiar en momentos de estrés o angustia; sin embargo, para muchos no es tan común.
Un amigo nos puede recomendar que visitemos al médico si nos ve enfermos, nos puede animar a comer mejor si hemos engordado mucho o nos puede animar a hacer ejercicio juntos. Incluso podemos hacer «sacrificios» por esa persona si lo necesita: ir a un restaurante de comida saludable, acompañarla al gimnasio, no fumar delante de ella, etc. Las relaciones sociales son muy importantes para nuestra salud física y, por supuesto, para nuestra salud mental.
«Soy una persona tímida o demasiado efectiva con los demás»
Tanto si eres tímido como alguien que nunca deja de hablar o bromear, es posible que tus amigos no puedan conectarse para ver con tú.
Los amigos siempre conectan a nivel emocional, son relaciones en las que se comparten momentos y sentimientos, por lo que tu actitud mesurada, prudente y activa puede ser determinante en el caso de que no desistas de tus amigos.